"Muchas veces nos lamentamos por no saber cómo formar a nuestros agentes de pastoral. Pues bien, aquí tenemos un medio excelente, que al menos deberíamos conocer"
P. Eleuterio Ruiz, Director de la Junta Catequística Diocesana Argentina
"... En síntesis, las convivencias son una riqueza, más allá de toda espiritualidad personal, abierta a todo hombre, mujer, cura, laico, religioso, consagrado, que quiere encontrarse con un Dios Vivo y compenetrarse de ese miesterio de Dios. Es un catecismo sencillo, lleno de Espíritu Santo"
P. Juan Carlos Alfaya, Sacerdote diocesano
"... Doy testimonio de que 'El dedo de Dios está aquí'. Y le agradezco por haberme permitido participar en estas convivencias que en los años más felices de mi sacerdocio, me han puesto 'la guinda en el helado' "
P. Horacio Bojorge, S.J. Profesor de Sagradas Escrituras, Autor de teología y espiritualidad - Montevideo - Uruguay
"Las Convivencias con Dios pueden ayudar mucho al desarrollo de la vida cristiana de los fieles en México, y especialmente a las comunidades carismáticas les puede brindar una serie de herramientas para su crecimiento espiritual"
P. Gilberto Chávez, S. de J. Administrador parroquial México
La CcPablo me hizo ver muchas cosas…y como joven me ayudó muchísimo a seguir perseverando en la oración, a confiar más en que Cristo todo se puede, que si estamos dispuestos a seguirlo, pasaremos por muchas cosas, pero al fin y al cabo nos gloriaremos en El. Los frutos que me llevo son la perseverancia y la confianza en El que todo lo puede.
Carlos Omar González (23 años)
CcPa (Convivencia con Pablo)
Oberá-Misiones
Enero 2016
MI TESTIMONIO al culminar la CcDA
Tengo 68 años de edad y más de 40 de vida religiosa.
Hace diez años, en febrero de 2002, hice en Corrientes la CcC. Entonces estaba superando una de esas crisis que no dejan nada en pie. (¿Una de las ‘Noches…’?)
Unos meses antes mi resistencia era total. Un hermano de la Comunidad, con quien en ese momento yo estaba en contacto por motivos ajenos a la CcD, me invitó a hacer la CcE.
Resolví no hacerla. ¿Por qué…? Porque consideré que, en ese momento y a partir de otras experiencias espirituales vividas hasta entonces, una experiencia espiritual más era, para mi, hacer ‘turismo espiritual’. (¡TÚ, Señor te apiadaste de mi…! ¡GLORIA A TU NOMBRE!)
A partir de este impensado regalo del AMADO, y acompañando a otros hermanos y hermanas a vivir desde esta gracia, el Señor me fue mostrando que, en este camino de las CcD, me entregaba lo que desde siempre había buscado incansablemente: tener la certeza de su presencia real, viva, gozosa, en el día-a-día de mi vida.
Él, como hábil hortelano, fue removiendo mi interior para sembrar, en la tierra de la dura aridez de mi vida, las semillas de su amor.
Con el rocío de su Espíritu las regó cotidianamente. Pacientemente, Él mismo, cuidó su lento crecimiento. Y ahora puedo ofrecerle los frutos que su gracia maduró en mi. Frutos de ALABANZA Y ADORACIÓN. Frutos que deseo sean también alimento para que otros hermanos y hermanas gusten lo sabroso de su AMOR.
Otro caudal de gracias de este tiempo tan especial está relacionado con mi vida como Religiosa. En su inmenso AMOR Él fue ahondando, ensanchando en mi interior, mi identidad de Consagrada en esta Congregación de Hijas de Nuestra Señora de la Misericordia. Puedo testimoniar, como religiosa, que esta experiencia vivida junto a tantos hermanos laicos y laicas enriquece a toda la iglesia al sabernos y sentirnos todos parte de este pueblo de Dios que camina buscando la plenitud de su amor, tantas veces por caminos errados.
Hoy, al culminar la CcDA, un fuego interior continúa impulsándome a “no callar lo que he visto y oído”. (Hechos 4, 20) Siento que El amor esponsal, con el que Él me fue colmando, me urge a testimoniar las maravillas de ese amor. Quiero hacer de ese testimonio mi permanente ALABANZA y ADORACIÓN a su PRESENCIA, que es donde quiero vivir. GLORIA A TI SEÑOR, PARA SIEMPRE…
Hermana Teresa Libardi. H.D.M CcDA, Posadas 9 al 15 de enero 2012.
Este año decidí pasar unas vacaciones distintas luego de atravesar un año difícil a nivel laboral y personal. Es así que llegué a la Convivencia con Pablo con esa carga pesada que no podía sobrellevar más. Las expectativas que tenía fueron ampliamente superadas, conocí jóvenes, muy jóvenes con gran entusiasmo de anunciar a Cristo, que aman a Cristo y que quieren dar su vida por Él. Es loco a veces creemos que somos pocos en esta aventura pero cuando conocemos a hermanos que están en la misma sintonía del Señor nos damos cuenta que “vale la pena seguir a Jesús” a pesar de nuestras caídas, debilidades y hasta a veces de sentir el rechazo de parte de los hermanos. Yo no dudo que el camino del Señor sea fácil pero es hermoso amar aunque duela.
Los frutos que me llevo de esta Convivencia los puedo resumir en dos Paz y Fuerza para continuar con esta aventura que tiene un comienzo pero no un fin.
Un abrazo en Cristo Redentor.
María Laura, 34 años.
CcPe (Convivencia con Pedro)
Oberá-Misiones
Enero 2016
Córdoba, 19 de Abril del 2013.
Paz Y Bien, Hermano/a
Me llamo Leonides de las Hermanas Terciarias Franciscanas de la Caridad, y por “un Sí flojo”, hace unos 4 años, tuve efusión del Espíritu Santo al acompañar a un sacerdote en sus jornadas de bendición… así con vida nueva y todo “lo conocido, revuelto!”, sin entender lo que pasaba y necesitada “dar nombre” …empezaron en una semana, a llegar los emisario: Un policía, un librero, una vecina, todos de CcDios! Alabo al Señor que aun hoy, me sigue mostrando sus caminos en lo cotidiano.
Inicié un segundo noviciado en el grupo de oración, pude encausar ésa fuerza interna que me invadía, secundar la gracia y experimentar con CcCristo la alegría y el fervor por la Palabra de Dios, con CcPablo orar en lenguas y ejercitar desprendimiento… y finalmente con CcPedro, ser una Iglesia fecunda y misionera… hasta en Cita con Dios:el abrazo del Padre y de Jesús me dio “el pase para un nuevo nivel de juego!!”… algo infuso pero también si uno secunda lo haces propio y empezas a administrar los tesoros de gracia que habla San Pablo. Una maravilla, probalo!
Así gradualmente como sucede en la historia de salvación entre alianzas e infidelidades, el Señor especialmente la Ruaj Santa ha ido modelando mi corazón: dialogo interno, purificación. Ligado en …, pastoreo, irradiación, maternidad espiritual…me enseñó a ser fecunda desde la pobreza interior y ahora ando aprendiendo “Obediencia en el Espíritu”?!, próximamente haré un retiro de dedicados a ver si me da una clave, aunque entiendo que todo está en la escucha y la docilidad.
Testifico que la CcDios, es una escuela de espiritualidad que acude a revitalizar la VC desde los cimientos del Bautismo hasta la fecundidad en vida y obra. Además, ccDios “me dio hermanos” como dice mi Padre Francisco.
Lo aprendido en VC, no es desechado sino es catapultado con la experiencia mistagógica, es el Espíritu Santo que nos une y nos hace espirituales y nos capacita para ser “Teóforas” . Anímate a la aventura, te advierto ya nada será igual.Bendiciones.-
La convivencia con Cristo fue la experiencia más hermosa que viví. Y los días pasan, y la felicidad sigue, convivencia con Cristo: te llevaré siempre en mi corazón. Una semana maravillosa e inexplicable. Contentísima de haber podido vivir todo eso, y conocer a estas hermosas personas, que ya se hicieron hermanos en Cristo. Feliz de haber conocido un pedacito de cielo en la tierra!!! Y de Vos Jesús no me alejo más!!!
Gracias por tu infinito amor. Y en especial gracias a todas aquellos que hacen posible esto que es tan hermoso!!!
Angie Arrúa (17 años)
CcC (Convivencia con Cristo)
Capioví-Misiones
Enero 2016
MI TESTIMONIO DE LA PRESENCIA VIVA DE JESUS
En primer lugar quiero destacar la transmisión de la fe por parte de mi madre, quien me enseñó a rezar, a participar de la Eucaristía y a confiar plenamente en Dios y en la Virgen Santísima.
También es cierto, que en mi adolescencia, y a pesar de no haber perdido la fe, estuve alejado del Señor, con una participación pequeña y tibia en la Iglesia. Aproximadamente a los 22 años conocí un grupo de oración en una parroquia de mi ciudad, Santa Fe. Fui invitado a orar por los hermanos inundados, pero a decir verdad, desde ese miércoles, nunca falté al grupo de oración, comencé a crecer en el verdadero conocimiento del Señor. Participé de Seminarios de vida, que fueron llenando mis vacíos, comencé con las Convivencias con Cristo, y cada vez más mi corazón se fue llenando de Dios, mi vida se transformaba, y necesitaba ser cada día más de mi Jesús. Oración y Eucaristía diarias, retiros, fueron los elementos a través de los cuales el Señor fue llamándome y confirmando una vocación. Lo primero que surge, y viendo la necesidad en mi Iglesia, a la cual comencé a amar y amo entrañablemente, de sacerdotes, tomé la decisión de buscar un guia espiritual para discernir bien este llamado. Con la gracia de Dios, llegué a la conclusión de ingresar en la Congregación de los Hijos de la Inmaculada Concepción, a la que actualmente pertenezco. En los comienzos, el ambiente era bastante hostil a este tipo de espiritualidad carismática, pero pacientemente continué mi camino, buscando momentos oportunos para participar en algún grupo de oración.
El Señor no se hizo esperar mucho. Ya en mi noviciado, donde tuve la gracia de tener como guia espiritual al P. Alberto Ibañez, en la ciudad de Buenos Aires, mi Maestro de Novicios, el Hno. Carlos Torrilla, comenzó a incursionar a mi lado, esta forma nueva de vida en el Espíritu.
A partir de allí, no tuve inconvenientes, el Señor ya había allanado el camino de vida en el Espíritu. Luego de mis Votos Perpetuos, vino mi Ordenación Sacerdotal. Cuánta gracia de Dios misericordioso! Presidir o con-celebrar la Eucaristía, dejándome llevar por el Espíritu comenzó a ser una experiencia de sorpresa en sorpresa. La vivencia de esta espiritualidad nueva en mi vida tocó lo más profundo de mi ser e hizo que pueda acompañar y ayudar a tantos hermanos y hermanas a lo largo de mi ministerio sacerdotal. Poder transmitir a Cristo, partirme y repartirme con Él, perdonar en su Nombre los pecados, dar palabras de aliento, acompañar a perdonar y pedir perdón a los que se ofenden, etc, etc. En fin, gracia tras gracia.
Mi amor y devoción a la Madre de Dios, y Madre nuestra, María Santísima, se intensificó, a la vez que se purificó.
El testimonio que dejo ahora por escrito es el fruto de lo vivido, de lo compartido en el Señor. Es, junto a mi sacerdocio, lo más grande que el Señor a puesto en mi vida, el lugar donde pude discernir, sanar y crecer con la libertad de los hijos de Dios.
P. Ruben Juarez (cfic)
DNI 11845469
Llegué En estos días de la Convivencia con la Trinidad, el Señor me regalo la gracia de sentir profundamente un amor diferente, un amor suave como una caricia, como con un respeto pero a la vez con autoridad como para que no queden dudas de su Presencia.
En un momento experimenté una voz dulce que me decía “póstrate ante El”. Lo hice y al instante me inundó su amor infinito que era capaz de estar horas en ese “lugar”.
“Entrégame tu corazón”, me dijo. Le respondí sí te lo entrego, entonces me dijo –“falta algo”: “El perdón a tu madre”. Llore porque sentía que me arrancaban algo grande. Eso era verdaderamente lo que me falta entregar de años.
No había tenido una infancia feliz, pero Dios que es grande y bondadoso me lleno ese vacío y de ese dolor con su gran amor.
El final es quede liberada de lo que arrastraba, y me sumergí ese misterio tan profundo y tan deslumbrante. Gracias Señor Uno y Trino.
CcT (Convivencia con la Trinidad) – La Paz, Entre Ríos
NELLY – Remedios de Escalada, enero de 2015
“¡Aleluya!
Quería compartir mi pequeño testimonio.
En mi vida tuve la formación en las cosas de Dios gracias a mis Padres. Ellos con su ejemplo y fe sencilla me ayudaron a tener el oído atento y el corazón abierto. Desde temprana edad miraba con atención los elementos de la Misa, la campanita, el ser monaguillo, el sacerdote que era un hombre grande y yo como niño lo ayudaba y me sentía parte de ese "misterio" que sucedía allí....
Luego de mi primera comunión ingreso a la ACA y luego se transformó en un grupo juvenil donde aprendí a caminar como Iglesia.
Mi mamá tuvo "segunda conversión" en la Renovación Carismática y a través de ella conocí esa corriente de Gracia.
Pero luego hice mi camino personal, donde aquellos primeros signos de vocación en la infancia, se fortalecieron en la alegría de la experiencia carismática.
Ingreso al Seminario de los Agustino Recoletos en el año 1996. En el año 1999 fui invitado por un seminarista del Clero de Bs As a la "Convivencia con Cristo".
Allí se despertó en mi algo nuevo, una vocación contemplativa en medio de las experiencias carismáticas y manteniendo fuertemente el llamado a la vida apostólica.
Ordenado Sacerdote en el 2002. Comienzo toda mi tarea Evangelizadora desde el ministerio, especialmente en la pastoral juvenil.
En medio voy haciendo las sucesivas convivencias, marcándome especialmente en el corazón la "Convivencia con María".
Esa nueva experiencia me hizo enamorar aún más de la Iglesia y pude experimentar como nunca el Amor de la Trinidad y el Amor de María.
Atravesé momentos de dificultad, purificaciones y pruebas como cualquier sacerdote joven, con aciertos y equivocaciones.
Pero aún en medio de las lágrimas, el Gozo de Dios era indescriptible.
Conocí con mayor profundidad a la "Comunidad Convivencia con Dios" y siempre vi en ella una verdadera "escuela de espiritualidad" y la pureza del amor, el fuerte sentido de Iglesia y un carisma, que es el ideal, que me fue atrapando..."Tender a la Unión con Dios". Ingreso en la Comunidad como asesor de la misma junto a otros asesores sacerdotes.
Trabajo durante varios años como asesor de la pastoral juvenil de la orden y asesor en pastoral de juventud de la Arquidiócesis de Santa Fe.
Luego de un período de discernimiento pido al Señor a través de la Iglesia Madre que me permita servirlo no ya desde la Orden Religiosa sino desde el Ejercicio del Ministerio en la vida Diocesana.
Fui aceptado (2011) e incardinado (2014) en mi diocesis de origen, San Martín, en Buenos Aires.
La Comunidad me ha hecho mucho bien y no le ha quitado "nada" a mi vida sacerdotal y a mis obligaciones ministeriales. Al contrario ! La "Comunidad Convivencia con Dios" potencia aún más mi entrega en la Caridad Pastoral y puedo irradiar toda su riqueza en medio de mis obligaciones de estado y tareas pastorales de todos los días, ya sea en mi parroquia ( administrador parroquial y capellán del colegio parroquial en los 3 niveles, más capellán de otro colegio secundario del decanato) como en las pastorales diocesanas que tengo a cargo (vice director Escuela de Ministerios y Pastoral Vocacional).
Por lo tanto reconociendo la "multiforme Gracia de Dios" considero el carisma de la comunidad como un "Bien" para ponerme al servicio de los demás (experiencia personal) y un bien para toda la Iglesia.
Pbro. Germán Esteban Aceto
Diocesis de San Martín
Le doy gracias, lo alabo y lo bendigo a Dios por este momento, por esto que me permite experimentar, vivir, sentir hasta lo más profundo de mí ser. Si de encontrarse con Dios se trata, lo han logrado y lo he logrado.
Hacerme llegar al encuentro, a través de la Rúaj, arrimarme a Él, siendo ustedes los servidores, canales, instrumentos maravillosos en sus manos.
Gracias Señor por tu invitación a penetrar en tus misterios y poder adentrarme con vos a través de esta escuela de espiritualidad.
Hermosa comunidad que me hizo sanar, liberar, perdonar, aceptar, amar y crecer. Me llevó por cominos jamás pensados. Estaba sorda, ciega y muda y vos Dios, hiciste el milagro en mi vida en mi caminar. Gracias porque a pesarde no pertenecer a esta escuela, me siento parte de ella y siempre me trataron con mucha delicadeza y con mucho amor. Gracias porque nos une el mismo Espíritu.
Siento que no soy la misma después de esta Convivencia con Dios Amor. He recorrido un camino largo que partió desde la Convivencia con Cristo, en elque Dios me fue transformando de una manera especial. Y sí, entre luces y sombras, alegrías y lágrimas, pero bueno el amor duele. Ahora descubro que el amor es dolor y el dolor es amor.
Me siento desborda de amor, anonada ante tanto amor y como broche de oro Dios me regalo esta Convivencia el día de mi cumpleaños. Aleluya…Gloria a Dios
CcDA (Convivencia con Dios Amor), La Paz, enero de 2015.
SILVIA – RESISTENCIA (CHACO) –
(Comunidad Terapéutica Pescador de Hombres)
Agradezco mucho al Señor las gracias recibidas en el ámbito de la Comunidad de Convivencias con Dios. Entre otras el reavivamiento del fervor y la consolación sensible, la activación del don de lenguas y la manifestación de otros carismas que el querido Pa Ibáñez y algunos otros hermanos me ayudaron a reconocer en mí.
Mi espiritualidad se había ido enfriando y debilitando durante los años de mis estudios de filosofía, de teología y de Sagradas Escrituras transcurridos, éstos últimos, en Holanda y Roma.
Con los años he ido reconociendo cada vez más claramente que eso había sucedido debido a la creciente secularización y la marea modernista de la que no estaban libres las instituciones académicas en la Iglesia, ni siquiera el Instituto Bíblico en Roma, y que llevó a tantos hermanos en la fe y en el sacerdocio a la tibieza, luego al enfriamiento y por fin a la apostasía manifiesta o anónima.
La renovación carismática ha sido un soplo del Espíritu Santo para remediar a los enfermos y hasta para resucitar algunas víctimas del virus modernista.
Alabado sea el Señor por siempre pues no abandona a su Esposa la Iglesia y nos suscitó al Padre Alberto Ibáñez y la Comunidad de Convivencias con Dios.
2015 - P. Horacio Bojorge S.J.
En esta Convivencia con María experimenté, Señor, tu amor generoso al permitirme vivir en el corazón de la Madre.
Allí, en varios momentos del retiro sentí una dulzura inigualable, como así también me regalaste un silencio profundo que hacía ver toda la sanación que recibía, pero con el mimo de la Virgen.
Jesús, a través de María, fuiste enseñándome a pedir perdón y perdonar, y a medida que me liberabas me inundaba una ternura desconocida en mi vida.
Como propósito de esta Convivencia con María, pido Señor, hacer tu voluntad con sencillez y humildad, y que a cada instante de mi vida, pueda decir “QUE SE HAGA EN MI, TU VOLUNTAD”, quiero abandonarme en Ti para ser una creatura nueva.
Padre Amoroso, gracias por tanto amor y como siempre proclamo: “la cruz delante y el mundo atrás”.
Amén
MARIA BELEN ORTIZ
CcMa (Convivencia con María) – RESISTENCIA (Chaco)
Llegué a la convivencia con muchas expectativas y deseos de participar, luego de sortear muchas dificultades económicas, ya que soy de Catamarca y se me hacía un poco costoso llegar a Entre Ríos. Al llegar a La Paz, solo encontrarme en tan bello lugar comencé a sentirme bien en mi interior y con un gozo grande por estar allí!! A la espera de lo que el Señor me quisiera regalar en estos días de la mano de Pedro.
Yo llegué a la convivencia con un fuerte deseo de aprender de Pedro; hombre rudo, recio, a veces testarudo y desconfiado, muy trabajador, etc. (así lo veía yo), a dejarme moldear por Jesús, por su ternura y su amor. Me sentía identificada con él en algunas características personales y porque también tengo pequeñas comunidades que acompañar (mis hijos y por ser directora en un colegio; un grupo de alumnos, docentes, auxiliares). Sentía que si Jesús transformó de a poco el corazón de ese hombre, me invitaba a dejarme transformar también por ÉL!!
Los días fueron transcurriendo y junto a eso fui experimentando distintas cosas en mi interior; reconozco que es primera vez que me pasa esto, desde malestares físicos, dolores terribles de estómago, de cabeza, hasta incomodidades en el cuerpo a la hora de compartir reflexiones y oraciones en mi pequeña comunidad de Zabulón.
A la par de estas distracciones me esforzaba por concentrarme en lo que estaba haciendo, orando o reflexionando, y le rogaba al Señor que me permitiera estar bien porque quería vivir el encuentro con Él a través de Pedro.
El momento de la efusión del Espíritu lo viví con serenidad, y tratando de disponer mi corazón a lo que el Espíritu quisiera regalarme. Esta vez, durante el día oré pidiéndole al Señor me concediera un corazón dócil y disponible a su acción, y creo que sucedió así, si bien no recibí el don de lenguas, la oración de la comunidad, entre lenguas, cantos, susurros, silbidos y carcajadas me permitió vivir el gozo que seguramente existe en el cielo!! Gloria a Dios, terminando esa contemplación con un gran abrazo de Dios Padre y un canto suave de cuna brindado por la hermana que estaba a la par…. Gracias Señor por tanto Amor!!!
A medida que pasaban los días sentía fuertemente en mi corazón que el Señor me decía una y otra vez, tranquila Sonia, aquí estoy Yo, déjate amar, descansa en Mí….me sentía muy consolada y también que poco a poco iba aprendiendo a abandonarme en sus manos y en su corazón
Otro momento muy fuerte y de profunda oración fue en la contemplación “La iglesia de Babilonia”, en donde recibí mi nuevo bautismo!!! , y fue en ese mismo instante en que sentí una necesidad de alabar y agradecer a Dios por lo que Él estaba haciendo por mí y por lo que me quería decir en esa contemplación…. SONIA NECESITAS NACER DE NUEVO, SER PURIFICADA POR EL AGUA DEL BAUTISMO, Y CON ESA GRACIA DEBES EDIFICAR MI IGLESIA!!!
Cuántas cosas mi Señor, cuántos regalos de tu amado Corazón!! Al finalizar esa contemplación todo mi cuerpo, y mi ser estaba lleno de gozo, me sentí inundada por el Espíritu del Señor y fue hermoso recibir el abrazo fraterno de toda la comunidad allí presente!!! En Pedro me he visto reflejada una y otra vez, le ruego al Señor logre verme reflejada en su FIDELIDAD Y ENTREGA A CRISTO Y SU IGLESIA!!
Sonia Sarmiento CcPe ( Convivencia con Pedro) La Paz, Entre Rios Enero 2016
Amadísimo mío:
Gracias Jesús, porque organizaste y planificaste todo para que viniera a disfrutar de tu AMOR. A disfrutar de esta hermosa y dulce intimidad con vos, descubriendo a su vez la hermosura del silencio junto a María. Ella tan próxima, tan cercana como nunca lo había experimentado antes.
Gracias mi Señor por las miradas llenas de gestos comunitarios de mis hermanos conviventes. ¡Cuánta restauración, cuánta sanación, cuánta purificación!
En estos días de la Convivencia con María recibí luces especiales que me aclararon dudas. Recibí también la Gracia de salir fortalecida en mis virtudes. Entiendo ahora que con la acción de tus dones, Señor, podré caminar en tu presencia, con mucha más fe y confianza, porque tu Espíritu Santo mora en mí y me ha guiado mi vida en todo tiempo y en todo lugar.
Hoy vuelvo más enamorada y agradecida a la vida cotidiana. Quiero, deseo ser una servidora fiel y eficaz instrumento de paz y unidad en mi comunidad. Amén
HILDA BLANCO
CcM (Convivencia con María) – Resistencia, enero de 2015
© 2023 © Convivencia con Dios